Ahora la vacuna se ha fabricado y parece haber funcionado en animales de experimentación. En el mes de Octubre del 2001, el Food and Drug Administration de los Estados Unidos ha dado "el vamos" para iniciar el ensayo en voluntarios humanos en la ciudad de Nueva York.

La cocaína siendo una molécula pequeña, pasa inadvertida para el sistema inmunológico, por lo que no fabrica anticuerpos contra ella. Para conseguir que los produzca, se ha ideado unir a la cocaína una molécula de mayor tamaño, como es la toxina del cólera. Ello hace reaccionar al sistema inmunológico, el que inmediatamente produce un anticuerpo contra la droga.

La empresa Xenoba, que adquirió la vacuna cuando la inventó Cantab Pharmaceutical, acaba de anunciar los primeros resultados de un ensayo preliminar realizado en nueve adictos a la cocaína. Después de recibir cuatro inyecciones de la vacuna, se pudo detectar en su sangre una buena cantidad de anticuerpos anti-cocaína. "Pero aún no sabemos cuánto anticuerpo se necesita para que la vacuna sea efectiva", dice John St Clair Roberts, director médico de la empresa.

Los cocainómanos vacunados afirman que cuando después tomaron coca, sintieron mucho menos síntomas psíquicos de agrado (high), lo que indicaría que a la célula nerviosa penetró mucho menos cocaína. Sin embargo es posible que si experimentan menos sensaciones, el drogadicto tome más cocaína, lo cual es peligroso, dado que ella afecta el corazón (Creces, Mayo 2001, pág. 7). También habría que estar seguro que la vacuna funciona contra la cocaína crack, cuya acción es más rápida, debido a que es más pura y se inhala en lugar de sorberse por la nariz.

Los investigadores piensan que la vacuna sólo debería darse a aquellos drogadictos que estén en tratamiento para abandonar la adicción. Allí puede ser muy útil para el apoyo psicológico. (New Scientist, Julio 2001, pág. 6).