En la actualidad, el 0.75% de la población adulta está infestada. Si bien es cierto que este porcentaje es menor que el observado en Camboya, Tailandia y muchas naciones africanas, debido al elevado número de habitantes de la India, ya se han acumulado más de 4 millones de enfermos. Es así como la India ha pasado a ser el segundo país con mayor número de casos de SIDA en el mundo.

Según un informe del Desarrollo de Programas de Naciones Unidas, la región Asia-Pacífico, ya ha sobrepasado a Africa en término de nuevas infecciones y la India (Sud-Asia) pasará, en los próximos años, a ser el nuevo epicentro de la infección.

En la política recién diseñada por India se pretende, como meta, lograr eliminar todas las nuevas infecciones para el año 2007. Ello mediante una estrategia consistente en incrementar la preocupación pública, controlar las enfermedades de transmisión sexual y mejorar el control de los productos de la sangre (bancos de sangre y otros).

Sin embargo, los expertos en salud afirman que estos objetivos para el año 2007 son imposibles de alcanzar, dado que la infección se está esparciendo demasiado rápido, habiendo ya pasado desde los grupos de alto riesgo al general de la población. Hay que considerar que ya la India sobrepasó los mil millones de habitantes, de modo que cualquier incremento del porcentaje de infestados, necesariamente significarán millones de nuevos enfermos.

La India se las ha arreglado para no reconocer las patentes de productos farmacéuticos (sólo reconoce la de procedimientos), con lo que sin pagarlas, está fabricando sus propias drogas anti-SIDA a bajo precio. Pero aun así, son todavía muy caras para muchos de los infestados. El gobierno ya ha declarado que no podrá enfrentar los costos de una distribución gratuita. Se espera que después del año 2005, los costos de los medicamentos se eleven, dado que en esa fecha deberá reconocer la ley de patentes frente al organismo de Comercio Internacional. Todo ello permite concluir que las metas señaladas de control del SIDA son demasiado ambiciosas.