El tratamiento que ha sido desarrollado por Isolagen de Houston, Texas, consiste en tomar una muestra de células de la piel detrás de la oreja para luego cultivarlas en el laboratorio durante 8 semanas. Cuando todo está listo, se inyectan debajo de las líneas de las arrugas. Según afirma Isolagen, las células implantadas crecen en la misma forma que las células de la piel ordinaria, y a diferencia de los tratamientos que se estaban realizando hasta ahora, de llenado intradérmico de colágeno o con inyecciones de la toxina paralizante “Botox”, el efecto es permanente. Más aún, con el tiempo y en la medida que las células inyectadas se desarrollan, la mejoría se va haciendo cada vez más evidente. “Es como una verdadera regeneración de la piel", dice Meter Sabih, un cirujano plástico de Londres.

Parece que mientras más tiempo se cultiven las células en el laboratorio y más se trabaje con ellas, mayor es el potencial para lograr cambios realmente sorprendentes en la reparación de las arrugas. Según los promotores de este tratamiento, no han observado efectos secundarios, ni tampoco ha visto que algunas de estas células se hagan cancerosas, como temían algunos.

La compañía Isolagen ya esta extendiendo sus facilidades de laboratorio a Nueva Zelandia, Corea del Sur y Hong Kong. Además esta esperando la aprobación del Food and Drug Administration de Washington para también comenzar a operar en Estados Unidos (New Scientist, Mayo 24, pág. 9, 2003).