El éxtasis hace que las neuronas absorban gran cantidad del neurotransmisor “serotonina”, la sustancia que regula el estado de ánimo. Parece que esta droga hace que los transportadores de serotonina en la neurona, reviertan la dirección, haciendo que entre al interior de la neurona, en lugar de ser expulsado.

Hay dos versiones del gene transportador de la serotonina. Una versión corta y otra larga. La versión corta ya ha sido asociada con la depresión que se produce a consecuencia del estrés. David Rubinsztein y sus colaboradores de la Universidad de Cambridge, Inglaterra, se propusieron estudiar si habría una asociación similar con el uso de éxtasis.

Estudiaron 66 consumidores crónicos de éxtasis, 30 fumadores de marihuana y 28 personas que nunca habían tomado ninguna droga. Observaron que las personas que tenían dos copias del gene corto y que tomaban éxtasis, tenían una considerablemente mayor tendencia a desarrollar depresiones que los que también tenían dos copias de los genes cortos y que fumaban marihuana, o que no tomaban drogas. (American Journal of Psychiatry, vol. 162, p.609, 2005).