Se consideran varias intervenciones, siendo la más importante la producción de una vacuna que pueda detener la extensión de la pandemia. Para ello se ha destinado un presupuesto de 2.8 mil millones de dólares.

El problema principal es que para preparar la vacuna hay que conocer exactamente la estructura del virus, que necesariamente será diferente al que hasta ahora ha contaminado a las aves. Por esto la OMS había afirmado que la vacuna no se podía producir hasta cuando no comenzara la pandemia, ya que sólo entonces se podría conocer cual era la cepa culpable. Sin embargo la elevada letalidad observada en humanos por el virus H5N1, obligaba a cambiar de criterio y proceder rápidamente a fabricar la vacuna que si bien puedan no ser tan buena como para detener la epidemia, por lo menos pueda prevenir la muerte del enfermo (Para la gripe del pollo se necesita producir la vacuna ahora).

El segundo problema es producir la suficiente cantidad de vacunas tanto para la población de USA y más aun la población mundial (Hay Dudas que se pueda fabricar a tiempo la vacuna contra el virus H5N1). Ello tomaría varios años, y para ese entonces la pandemia ya habrá pasado dejando sus secuelas. Es que preparar la vacuna de acuerdo a la actual tecnología, toma mucho tiempo, ya que para producirla, se debe lograr desarrollar el virus inyectándolos en huevos, proceso que toma por lo menos 9 meses de cultivo. Según esto, se puede calcular cuanto tiempo llevaría el preparar los miles de millones de dosis para toda la población. El plan que se está considerando contempla la producción de vacuna en un tiempo más rápido, haciendo crecer el virus en cultivos celulares. Ya media docena de empresas farmacéuticas están trabajando en ello. Hay que seleccionar una línea celular en la que se pueda optimizar el desarrollo del virus y luego hacerlo crecer en fermentadores de 100.000 litros. Después de esto, la vacuna tendría que pasar por la etapa de ensayo clínico, que también lleva un largo tiempo de evaluación.

A parte de esto, se contempla una importante cantidad de recursos, para proteger a las empresas productoras de vacunas contra posibles demandas por accidentes en su uso. Como se sabe, el producir vacunas no sólo tiene el costo del proceso, sino también los costos agregados por las crecientes demandas judiciales a las empresas productoras de vacunas, debido a los inevitables riesgos que ellas tienen, que han llegado a tal nivel, que ya la mayor parte de las empresas se han retirado de este rubro productivo (Vacunas e Ingeniería Genética).

A parte de la vacuna, el plan contempla también producir la droga adecuada para el tratamiento, como el Tamiflu (oseltamivir) y Relenza (Zanamivir). Estas deberán estar disponibles para el 25% de la población, ya que se estima que esa sería la proporción de personas que enfermería durante la pandemia. Se sabe que estas drogas tienen que tomarse precozmente, ya que su acción es bloquear la multiplicación intracelular del virus. Hasta ahora se conoce su acción en los virus de la gripe en general, pero no se sabe como actuaría contra el virus H5N1. Este programa tiene un costo de mil millones de dólares.

Otros 250 millones de dólares se piensan gastar en ayudar a otros países para que desarrollen una capacidad de detectar y responder precozmente frente al inicio de la pandemia.

Claro que todos estos preparativos se están llevando a cabo pensando que la pandemia ya viene. Pero también es posible que estas medidas sean exageradas y que no pase nada. También es posible que si el virus muta, se transforme en un virus que si bien pueda transmitirse de hombre a hombre, tenga mucha menos virulencia que la prevista en las aves y en los humanos contaminados a través de ellas. Ojalá que así sea.