El color de la piel de las personas varía desde el negro oscuro, al blanco, pasando por todas las variables intermedias. Las variaciones se determinan por el contenido de melanina, pigmento que se encuentra en los melanosomas de las células de la piel y es el que protege contra las radiaciones ultravioletas (La ventaja de la piel negra). Hasta ahora no se conocía la genética que regula el color de la piel. En un trabajo reciente publicado en la revista "Science" (Diciembre 16, del 2005, pág. 1782) se describe la identificación de un gene que codifica un pigmento en la piel en el pez cebra, que tiene una estructura semejante con un gene que codifica la melanina humana. Aparentemente es este gene el que marca la diferencia entre los tonos de la piel del africano y la del europeo.

El nuevo gene se ha llamado SLC24A5 y fue descrito por Keilth Cheng y su equipo de investigadores en genética, que pertenecen al Colegio de Medicina de la Universidad del Estado de Pennsylvania. Ellos estaban trabajando con el pez cebra como modelo para sus investigaciones en genes y cáncer. Como sucede muchas veces en ciencia, una determinada investigación, lleva a observaciones no esperadas que conduce a una nueva línea de investigación. En este caso, les llamó la atención un pez cebra mutado, cuyas líneas oscuras de la piel (donde se concentra la melanina) tenían otro color. Allí Cheng y su grupo identificaron al gene mutante y comprobaron que este compartía el 70% de la secuencia de sus bases, con el gene humano SLC24A5.

Los investigadores reconocen que el gene SLC24A5 no es toda la historia. Aun cuando el 93% de los africanos y asiáticos comparten el mismo alelo, estos últimos tienen la piel más clara. Esto significa que necesariamente debe existir otro paquete de genes que también afectan el color de la piel, algunos de los cuales ya han sido identificados.