Se identifican las células troncales cardíacas
( Creces, 2007 )
Como muchos otros órganos, el corazón esta constituido por un conglomerado de células diferentes, desde las células del músculo liso que constituyen los músculos que impulsan la sangre a través de las arterias, hasta las células endoteliales de la superficie de los vasos sanguíneos. Por lo variadas que son, siempre se había considerado que derivaban de células diferentes. Pero dos nuevas y recientes investigaciones realizadas en ratas han permitido descubrir que derivan de una misma célula primitiva. Si el hallazgo es verdadero podría el corazón pasar a ser uno de los pocos órganos, que al igual que la sangre, se originarían a partir de una sola célula troncal. Ello podría significar que sería factible introducir células troncales embrionarias para tratar enfermos cardiacos y recuperar las lesiones.
"Es sorprendente que células tan diferentes puedan provenir de un solo tipo de célula troncal", dice Timothy Kamp que estudia regeneración cardiaca en la Universidad de Wisconsin, Madison.
Dos grupos de investigadores han llegado a esta misma conclusión. Aún cuando han seguido caminos con marcadores genéticos diferentes, ambos han concluido que las células primitivas pueden diferenciarse en células musculares y células vasculares sanguíneas. El primer trabajo dirigido por Gordon Séller, un biólogo de células troncales en el Mount Sinai School of Medicine en la ciudad de Nueva York, ha sido publicado recientemente en "Development Cell". El segundo dirigido por la pareja de marido y mujer, Karl-Ludwing Laudwitz y Alexandra Moretti de la Universidad Técnica de Munich en Alemania, ha aparecido recientemente en la revista "Cell" de Noviembre 2006.
El equipo de Chien encuentra que las células troncales embrionarias de ratas, comienzan por entrar en un estado intermedio que es monitoreado por tres genes diferentes. Estas células intermedias que los científicos llaman "células triple positivas", dan sólo lugar a células cardíacas. Para confirmar la existencia de estas células triple positivas progenitoras que crecían en condiciones artificiales, existían realmente en animales, los investigadores examinaron embriones de ratas en diferentes etapas de su desarrollo. Su presencia la pudieron detectar alrededor del octavo día.
Séller, que no usó los mismos marcadores que Chien para caracterizar las células, encontró también que se podían diferenciar en los mismos tipos de células cardio-vasculares.
Moreffi señala que para probar que estas células progenitoras pueden llegar a ser células cardiacas funcionales, se necesita inyectarlas en el animal, para observar si dan origen allí a tejidos celulares diferentes. Este también es un experimento clave para saber si estas células troncales pueden llegar a reparar el daño cardíaco. El grupo de Séller ya ha comenzado este experimento, insertando las células progenitoras que ha identificado en el corazón de las ratas.
Chien señala que ellos no han probado definitivamente que estas células pueden llegar a formar un corazón entero. Pero les preocupa que al ensayarlas en humanos, estas células troncales se transformen en células troncales cancerosas. (Las células troncales y el cáncer). "Además hay que tener en consideración que estas mismas células debieran ser lo suficientemente flexibles como para formar una arteria coronaria que incluye varios tipos de células diferentes".