La historia del chocolate
( Creces, 2016 )

El chocolate ha sido calificado por algunos como un “placer saludable", ya que su consumo aporta muchos beneficios de salud, además de un alto aporte en calorías (1). El chocolate es uno de los alimentos con más alto contenido de materia grasa (30 a 55%). Chocolate deriva de la palabra azteca "xocolatl", cuyo significado es “agua espumosa", denominación que era utilizada por los Olmecas (1500-400 A.C.), por los Aztecas (1400 A.C.) y posteriormente por los Mayas (600 A. C.), para identificar una bebida amarga, de fuerte sabor, y de alto valor energético, utilizada también con fines medicinales (2).

Cuando el emperador azteca Moctezuma agasajó, en 1520, a Hernán Cortés y a sus soldados con xocolatl, el conquistador español comprobó que consumiendo solo un vaso de xocolatl sus tropas adquirían más vigor y podían soportar todo un día de marcha forzada. Moctezuma y sus súbditos creían que el conquistador era la reencarnación de Quetzal- coalt, el Dios-Rey tolteca, y por tal motivo el emperador le obsequió la plantación real de cacao de Manialtepec, lo que Cortés aprovechó muy bien, ya que estableció con los indígenas el intercambio de las avellanas del árbol del cacao por oro (3). Esta es, quizás, una de las primeras formas de cómo los europeos conquistadores comenzaron a despojar de sus riquezas a los habitantes del nuevo mundo. Sin embargo, es meritorio destacar que la historia atribuye a Hernán Cortés el haber sido el primer europeo en reconocer el enorme potencial económico del cacao como un alimento. En realidad, el primer europeo que tuvo contacto con el cacao fue Cristóbal Colón, quien en su cuarto viaje a América en 1502, en una breve escala de viaje en lo que ahora es Nicaragua, descubrió que los indígenas consumían una bebida fuerte y amarga que les aportaba fuerza y vitalidad. Sin embargo, al parecer, el gran descubridor no se percató de la importancia alimenticia de esta curiosa e importante bebida (2).

El primer nombre del árbol del cacao fue "Amygdalae pecuniariae" y que significa "dinero-almendra" por su significado como moneda de intercambio entre los indígenas. Sin embargo, fue Carl von Linne (Linneo) quien realizó la primera clasificación botánica sistemática del árbol, denominándolo "Theobroma cacao", y que significa “cacao, alimento de los dioses" (4). La infusión obtenida del prensado de las almendras del cacao importadas de América, se hizo muy popular en España, donde los monjes católicos adaptaron la infusión, originalmente muy amarga, al paladar europeo, adicionándole miel o azúcar, siendo así su preparación casi un secreto de estado. La iglesia católica, consideró que la infusión de cacao, ya identificada como "chocolate", no era un alimento sino una bebida, apoyándose en Tomás de Aquino quién promulgó que "liquidum non frangit jejunium" (los líquidos no quebrantan el ayuno), por lo cual el consumo de la infusión no rompía las estrictas reglas del ayuno que imponía la religión en aquella época. De esta forma, el consumo del chocolate como una bebida se hizo tremendamente popular debido a sus exquisitas características y a la ausencia de restricciones para su consumo.

El consumo de la bebida se extendió por toda Europa surgiendo, así, diferentes modalidades para su preparación. En 1657, un ciudadano francés que residía en Londres abrió un local llamado "The Coffee Mili and Tobaco Roll", en el cual comenzó a vender tabletas de manteca y polvo de cacao para preparar la bebida en Inglaterra, siendo históricamente el punto de partida de la popularidad del chocolate en Europa. Los suizos comenzaron a fabricar chocolate a mediados del siglo XIX, cuando el industrial Daniel Peter lo mezcló con leche líquida para hacerlo más cremoso. Sin embargo, la mezcla no fue exitosa debido a la dificultad para mezclar un producto esencialmente graso, con uno de base principalmente acuosa.

Fue un fabricante suizo-alemán de leche evaporada, Heinrich Nestle (que más tarde "afrancesó" a Henry Nestlé) quien tuvo la idea de mezclar la pasta de cacao con leche evaporada y azúcar, iniciando así la fama del chocolate suizo. Posteriormente, otro suizo, Rudolf Lindt comenzó la fabricación de tabletas de chocolate sobre una fórmula similar a la de Nestlé. Más tarde, Theodor Tobler desarrolló la clásica forma triangular de sus productos. Paradójicamente el cacao volvió a América en manos de empresarios confiteros, como Milton Hershey, quienes lo industrializaron masivamente. Fue quizás durante la primera y segunda guerra mundial donde más se popularizó el consumo de chocolate, ya que era uno de los alimentos prioritarios de las tropas americanas en el frente europeo y asiático, quienes obsequiaban barritas de chocolate a los hambrientos habitantes de los países vencidos. Nestlé, Tobler, Peter, Lindt, Hershey y otros fueron verdaderos innovadores en la industria del chocolate. El chocolate, particularmente aquel que tiene un alto contenido de cacao, es considerado un alimento que aporta beneficios en la salud cuando es consumido en forma moderada (1).


Bibliografía

1.- Valenzuela A. El chocolate, un placer saludable. Rev. Chil Nutr. 2007; 34;180-90.

2.- Coe, S., Coe M. The true history of chocolate. Thames and Hudson, London, UK 1996.

3.- Hurst, W., Tarka, S., Powis, T., Valdez , F., Hester, T. Cacao usage by earliest Maya civilization. Nature 2002; 418:289-90.

4.- Dillinger, T., Barriga, P., Escárcega, S., Jiménez, M., Salazar, D., Grivetti, L. Food of the Gods: Cure for the humanity? A cultural history of the medicinal and ritual use of chocolate. J. Nutr. 2000; 130:20575-725.



0 Respuestas

Deje una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados.*

Buscar



Recibe los artículos en tu correo.

Le enviaremos las últimas noticias directamente en su bandeja de entrada