Efecto del alcohol durante el embarazo
( Publicado en Revista Creces, Mayo 2000 )
Desde hace algún tiempo se conoce el efecto nocivo del alcohol en el desarrollo cerebral del feto. Ahora se sabe que durante el tercer periodo del embarazo, este produce la muerte de neuronas y que además induce conexiones aberrantes de algunas que quedan.
Se sabe que la ingesta de alcohol durante el embarazo produce defectos en el recién nacido. Sin embargo, a pesar de ello, un informe del Instituto de Medicina de Estados Unidos (1996) señala que un 20% de mujeres que beben alcohol continúan haciéndolo durante el embarazo. Como consecuencia, uno de cada 1.000 recién nacidos presenta el "síndrome fetal alcohólico" con deformaciones faciales, detención del crecimiento y posteriormente problemas en el aprendizaje y memoria (Dósis bajas de alcohol en la madre dañan el cerebro fetal) . Actualmente nuevas investigaciones aclaran cómo el alcohol puede causar algunos de estos daños (Science, Febrero 2000, vol. 287, pág. 1056).
John Olney, neurocientista de la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington en St. Louis, y sus colaboradores, utilizando ratas como animales de experimentación, descubren que el alcohol actúa a través de los receptores de las células cerebrales, para dos neurotransmisores; el glutamato y el GABA. Como consecuencia de ello se induce la muerte de neuronas.
Durante dos semanas después del nacimiento, los animales fueron expuestos a niveles altos de alcohol sanguíneo. Este período corresponde más o menos a las etapas del desarrollo cerebral humano que se producen durante el tercer trimestre del embarazo (en la rata el desarrollo cerebral es mayor después del nacimiento).
Como actuaría
Olney y sus colaboradores, en realidad, no estaban estudiando el efecto del alcohol en el cerebro. Ellos estudiaban el efecto de algunas sustancias químicas que bloqueaban los receptores llamados NMDA para el glutamato, que se sabe que es un neurotransmisor exitatorio. En esos trabajos anteriores habían comprobado que las sustancias químicas que bloqueaban los receptores NMDA producían durante la fase de desarrollo cerebral, cuando se estaban produciendo las conexiones de las neuronas, muerte programada de neuronas (apoptosis). Porque ya sabían que el etanol bloqueaba los receptores NMDA y activaba los receptores GABA, decidieron estudiar el efecto del alcohol sobre las neuronas. Sus resultados demuestran igual efecto nocivo del alcohol, que termina induciendo la muerte de neuronas.
James West, del Health Science Center de Texas A&M, que también ha estado estudiando el efecto del alcohol en el cerebro, señala que el alcohol no sólo mata neuronas, sino que también tiene otros efectos nocivos, como inducir conexiones erróneas de las neuronas, lo que terminaría afectando más tarde, muchas de las capacidades intelectuales del niño.
Estos nuevos antecedentes se unen a lo ya conocido, para llamar la atención acerca de lo nocivo que es ingerir alcohol, aun en dosis bajas, durante el embarazo. Frente a este hecho, las madres que sólo son bebedoras ocasionales, se abstienen de ingerir alcohol durante su embarazo. Otro problema lo constituyen las madres adictas, que no son capaces de suspender la ingesta de alcohol. Allí la única solución estaría en el desarrollo de una droga que bloquee este efecto nocivo. Al conocer el mecanismo de cómo el alcohol actúa en las células cerebrales, se abre un camino en este sentido.