Los estrógenos ayudan a recordar a la mujer
( Publicado en Revista Creces, Marzo 2000 )

Expertos canadienses han demostrado que la supresión de estrógenos en la mujer le producen lapsos de pérdida de la memoria que se restablece si éstas se vuelven a administrar. Estos hallazgos aportan antecedentes convincentes que los estrógenos tienen un efecto benéfico en los circuitos cognitivos en el cerebro de la mujer.

Ya estudios previos habían sugerido que la capacidad mental de la mujer está ligada a los efectos del estrógeno que producen los ovarios (New Scientist, Julio 31, 1999). Por otra parte, había evidencias que el tratamiento con estrógenos en la mujer post-menopáusica prevenía la aparición de enfermedades degenerativas del cerebro, como es el Alzheimer. Sin embargo se sabe poco cómo estas hormonas afectan el intelecto de la mujer en la etapa reproductiva.

Según Bárbara Sherwin de la Universidad de Mac Gill en Montreal, los trabajos que se han desarrollado hasta ahora, tratando de relacionar los cambios cognitivos con los ciclos menstruales en la mujer, han dado resultados muy dudosos. Tal vez ello sea debido a que los niveles de estrógenos normalmente no tienen grandes fluctuaciones, y nunca caen por debajo de un cierto nivel. Pero ahora Bárbara Sherwin y sus colaboradores han correlacionado estos dos factores (estrógenos y cambios cognitivos) en una situación extrema. Para ello han seguido un grupo de 100 mujeres entre 40 y 45 años, a las que se les había extraído quirúrgicamente sus ovarios y úteros, y que por lo tanto experimentaron una brusca caída de los niveles de estrógenos.

Sherwin dividió a las mujeres en dos grupos: Uno que recibió estrógenos después de la operación y otro que recibió placebo. Luego se sometieron a test que medían su memoria. Las mujeres que recibieron estrógeno rindieron los test igual que antes de la operación. En cambio, el grupo que recibió placebo tuvo un rendimiento significativamente más bajo (New Scientist, Septiembre 18, pág. 12, 1999).

En el caso de las mujeres que recibieron placebo fue notable que ellas mismas notaron cambios en su comportamiento. Se quejaban que no eran capaces de recordar y que tenían que escribir listas de las cosas que debían realizar durante el día lo que antes no les había sucedido.

Sherwin también desarrolló otro trabajo en un grupo de mujeres de aproximadamente 30 años de edad que presentaron tumores uterinos. Como los estrógenos incrementan el crecimiento de estos tumores, fueron tratadas con drogas que suprimen su producción. De nuevo, la disminución de esta hormona disminuyó su rendimiento en los test de memoria. De estos resultados se puede deducir que frente al déficit de estrógenos se produce en la mujer una pérdida de memoria, que no siendo de enorme magnitud, puede mejorarse con su administración.



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