Galaxias y hoyos negros
( Publicado en Revista Creces, Septiembre 2000 )
Según afirman los astrónomos, en el centro de cada galaxia, formada por miles de millones de estrellas, habría un hoyo negro masivo. En lo que difieren es que sería primero, la gallina o el huevo. Para algunos, el hoyo negro habría nacido precozmente en la historia del Universo. Luego el gas, moviéndose en espiral dentro de cada hoyo, energisaron los quasares, mientras grandes masas de gases más distantes, gradualmente se habrían ido colapsando hasta formar las estrellas de la galaxia. La otra hipótesis opuesta, supone que habría sido primero la coalescencia del gas la que habría llevado a la formación de las estrellas, y que posteriormente se habría formado lentamente el hoyo negro en su centro. Una tercera hipótesis ecléctica, sostenida por Virginia Trimble de la Universidad de California, piensa que las galaxias y los hoyos negros habrían madurado simultáneamente.
Hace un mes, en el Congreso de la American Astronomical Society, un grupo de astrónomos presentó un extenso estudio, según el cual afirman que las galaxias y sus respectivos hoyos negros crecían simultáneamente (Science, vol. 288, Junio 16, pág. 1947, 2000). Para ello se basaron en los datos recogidos por el espectrógrafo del telescopio Hubble, que revelaba el rápido movimiento orbital de las estrellas en el centro de cada galaxia, con lo que estiman tener una firme evidencia de la masa del hoyo negro oculto. Estos valores oscilaron en 33 galaxias estudiadas, entre 3 millones y 2 mil millones de veces la masa de nuestro sol.
Los investigadores encontraron una perfecta correlación entre el tamaño de los hoyos negros y el tamaño de la nube de la galaxia (gráfico). Mientras más masivo era el hoyo negro, más rápido se movían las estrellas en la nube galáctica. Según John Kormendy de la Universidad de Texas, Austin, estos resultados certifican la asociación evolutiva de la nube de la galaxia y lo masivo del hoyo negro, por lo que se puede asumir que el tamaño de este, esta determinado por el proceso de colapso de las estrellas.