( Publicado en Revista Creces, Octubre 2000 )
Los medicamentos no tienen los mismos efectos en todos los enfermos. Pueden sanar a unos, pero también matar a otros. Se ha señalado que en el año 1994, solo en los hospitales de Estados Unidos, murieron 100.000 enfermos por la administración de medicamentos que les generaron reacciones adversas.