( Creces, 2015 )
Contrariamente a lo que se pensaba hasta hace poco tiempo, es dentro del útero que el feto comienza a adquirir experiencias y conocimientos, como se ha estado comprobando mediantes nuevas tecnologías recién desarrolladas. Durante los últimos años, mediantes ultrasonidos en 3-D y 4-D, se están logrando videos e imagines fetales mucho más finas y vivas que las borrosas siluetas generadas anteriormente mediante el ultrasonido en 2-D. Junto a ello, nuevas metodologías no invasivas han permitido medir la actividad eléctrica del cerebro en formación, tanto del feto como del recién nacido. La información recogida por estas nuevas herramientas proporcionan un rico retrato de cómo el feto va usando su cerebro y sentidos en formación, para comenzar precozmente a aprender de sí mismo y del mundo desde antes de nacer. Estas tecnologías han aportado nueva información para mejorar los cuidados de pre término, sugiriendo beneficios de la tenue luz que perciben, las voces familiares calladas y los confortantes contactos de la piel entre la madre y el hijo (Ferrís Jabr: First Impressions. Scientific American, Julio 2015, pag. 24).