( Publicado en Revista Creces, Diciembre 1998 )
En el norte de China, un archipiélago constituido por cientos de minas de carbón subterráneas, se está incendiando. Con ello, cada año se consumen entre 100 y 200 millones de toneladas de carbón. Algunas han estado consumiéndose bajo fuego lento desde la edad del hielo, pero la mayor parte se ha incendiado en el proceso de extracción minera durante los últimos cincuenta años. Los costos por la pérdida de este recurso, se elevan a miles de millones de dólares, pero el daño ambiental que esto está produciendo, es aún mayor. Se estima que los incendios espontáneos de las minas de carbón de China son los culpables de un 3% del incremento del CO2 atmosférico que está produciendo el efecto invernadero.