( Publicado en Revista Creces, Octubre 2002 )
La industria biotecnológica ha progresado rápidamente y ya son numerosos los productos farmacéuticos que se producen por ingeniería genética, introduciendo los genes en bacterias o levaduras que luego se cultivan y cosechan para extraerles el producto. Así por ejemplo, al introducir el gene del interferón humano a una bacteria, ésta aprovechando su maquinaria metabólica, inicia la producción de interferón. Al cultivar las bacterias en un reactor, éstas se multiplican y se incrementa así la producción de esa proteína (interferón). Es así como en la actualidad la industria biotecnológica produce numerosas proteínas de uso médico, como la insulina, la hormona de crecimiento, los diversos factores de crecimiento, las interleukinas, etc.