( Publicado en Revista Creces, Julio 2001 )
Una investigación competitiva
John Ziman, antiguo presidente del Consejo para la Ciencia y la Sociedad en Gran Bretaña, estudia en su libro "Prometeo Encadenado" el aumento de la investigación científica. La investigación científica es una empresa fascinante que desde hace más de trescientos años gana terreno y no deja sospechar su fin. Como lo dice Ziman, "los descubrimientos mayores engendran mucho más preguntas nuevas que los enigmas que resuelven". El número de revistas científicas se dobla cada quince años desde hace tres siglos. La frontera de la ciencia frente a lo desconocido se agranda sin cesar; las aplicaciones se multiplican, ya sea en genética, electricidad o economía, y ellas mismas engendran nuevas investigaciones. Los medios necesarios han cambiado considerablemente. El progreso de las ciencias exactas o en medicina requiere una panoplia de instrumentos complejos cuya vida útil es cada vez más corta. En ciertas áreas, como la física de las partículas, se ha visto y hecho necesario a nivel internacional, adquirir en común, instrumental extraordinariamente costoso. La sofisticación de los equipos va a la par con el desarrollo del trabajo en equipo a través de fronteras interdisciplinarias, ya sean ciencias exactas o ciencias humanas. La investigación científica ha llegado a ser una competencia; aquellos que disponen de instrumental avanzado y equipos de avanzada, en primer lugar.