( Publicado en Revista Creces, Junio 1998 )
Una interesante investigación demuestra que las madres que beben alcohol durante el embarazo, aun en condiciones moderadas, su efecto negativo se puede comprobar posteriormente en los hijos en la edad de la adolescencia. Ello se traduce en alteraciones del comportamiento y problemas cognitivos (Journal of American Academy of Child and Adolescent Psychiatry, vol. 36, pág. 1187, 1997).