( Publicado en Revista Creces, Agosto 2003 )
Primero el tratado de libre comercio con la Unión Europea, y luego el TLC con E.E.U.U. Ambos representan una real oportunidad para reiniciar nuestro interrumpido desarrollo económico y social. Como consecuencia de haber logrado prevenir el daño del recurso humano (ya no hay desnutrición y se ha conseguido que la gran mayoría de la población está expresando su potencial genético) y de implementar simultáneamente nuevas estrategias económicas, basadas en la utilización de recursos naturales y un mercado abierto al mundo, fue posible un crecimiento persistente y significativo por más de 10 años. Ahora se presenta una oportunidad para reiniciarlo.