( Publicado en "La Revolución de la Bioingeniería", Fernando Mönckeberg, 1988,
Editorial Mediterráneo )
Los avances en el conocimiento de la estructura de los genes y sus posibilidades de manipulación, están aclarando los mecanismos por los cuales una célula se hace cancerosa, al mismo tiempo que están permitiendo el diagnóstico precoz de este mal e incluso hacen vislumbrar nuevas posibilidades terapéuticas.