( Publicado en Revista Creces, Abril 2000 )
Las personas que sufren de defectos congénitos del corazón no deben usar anillos ni pendientes en las orejas, ni en ninguna otra parte del cuerpo. La Clínica Mayo en Minnesotta, recientemente realizó un estudio en 445 pacientes con defectos congénitos cardíacos. Encontró que uno de cada cuatro pacientes con malformaciones cardiacas y que usaban anillos en las orejas, llegaban a desarrollar endocarditis, que es una peligrosa infección de las válvulas cardíacas. Probablemente ello es debido a pequeñas infecciones que se producen en el sitio de inserción de los anillos. Desde allí los gérmenes podrían entrar a la sangre y establecerse en las válvulas cardiacas.