( Creces, 2010 )
Fue en Septiembre del 2005 cuando la nave espacial japonesa Hayabusa, después de viajar cuatro mil millones de kilómetros, se acercó al asteroide Itowaka, a una distancia de 20 kilómetros y luego, después de algunas dificultades, pudo descender suavemente hasta posarse sobre su superficie durante 30 minutos Itowaka es un asteroide pequeño (fig. 1), con una masa de 250 metros, cuya órbita elíptica pasa entre Martes y la Tierra (fig.2) Con su llegada cumplió su primer objetivo: visitar por primera vez un asteroide. El viaje había sido largo, habiéndose iniciado el año 2003, demorándose tres años. Durante dos meses y medio, la nave, a 20 kilómetros de distancia, realizó observaciones científicas, observando la forma del asteroide, de su terreno, la composición mineral de su superficie y la forma en que esta reflejaba los rayos del sol.