( Publicado en Revista Creces, Abril 2002 )
Ya se ha alcanzado la cantidad máxima de peces que se pueden capturar en el mar, y diversos indicadores muestran que ésta comienza a declinar, lo que es un motivo de preocupación. La industria pesquera de los diferentes países, critican las limitaciones impuestas y afirman que ellas no tienen una utilidad demostrada. Una reciente e inesperada experiencia demuestra lo contrario.