( Publicado en Revista Creces, Mayo 2000 )
En el adulto joven y sano, la diarrea provocada por el rotavirus, por lo general, no pasa más allá de ser un episodio desagradable sin grandes consecuencias. Pero para los lactantes, y muy especialmente en el mundo subdesarrollado, donde la atención medica es precaria y la desnutrición prevalente, el rotavirus constituye una gran amenaza por la elevada mortalidad que causa. Cada año mueren en el mundo subdesarrollado 600.000 niños por diarreas producidas por el rotavirus.