( Publicado en Revista Creces, Marzo 1998 )
La utopía de la eterna juventud, ha estado presente a lo largo de la historia. Han sido numerosas las pócimas mágicas recomendadas. Ahora le toca el turno a la biología celular. A través de ella comenzamos a entender cómo y por qué envejecemos. Aún cuando no ha sido posible sobrepasar el límite biológico de la edad, diversos avances están permitiendo alcanzar una adecuada calidad de vida para el anciano. Sin embargo, no es imposible que en el futuro se logre vivir más. Pero ¿valdrá la pena?