( Publicado en Revista Creces, Enero 2001 )
Hasta ahora la terapia de genes no ha tenido resultados espectaculares. Cuando los ha habido, estos han sido transitorios, ya que el gene introducido no logra incorporarse al genoma de las células del paciente. En cambio, la terapia génica intrauterina ofrece la posibilidad de corregir el defecto en forma definitiva.